La casa consistorial de Villatuelda ha cambiado de imagen. Ha sido derribada la buhardilla situada en el centro de la vertiente sur del tejado, en cuyo frontal estaba colocada la esfera del viejo reloj.
La corporación municipal ha tomada esta decisión, debido a los perjuicios que ocasionaba sobre el tejado y la fachada principal del edificio; esta construcción sin valor arquitectónico y fuera de uso, que pesaba más de tres mil kilos y había abarquillado el tejado y desplazado hacia afuera la cornisa de la fachada.
El campanillo del reloj sigue colocado en la cumbrera del tejado, pero más como adorno y elemento decorativo que como pregonero sonoro del paso del tiempo; pues el mecanismo del reloj está estropeado y los contrapesos de “la cuerda” han sido eliminados.
La casa de la villa, luce ahora una imagen más sencilla y funcional. El vetusto templete del reloj sobre el tejado, realzaba su figura en medio de la plaza y le daba cierto señorío sobre los edificios de su entorno; pero la realidad es tozuda y al ser los perjuicios mayores que los beneficios, sobran los añadidos estéticos.
Comentarios
Antonio
Jue, 27/02/2014 - 22:06
Ya ni reloj de pulsera
En los tiempos que corren, con tanto artilugio moderno, ni reloj de pulsera se necisita. ¿Para qué tener un reloj que no funciona?. Pasó su tiempo y si encima perjudica, se debe quitar para evitar males mayores. Hasta "Mas" está de acuerdo, que lo dice en la foto.
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