Las cuatro parroquias (Torresandino, Villatuelda, Terradillos de Esgueva y Pinillos de Esgueva) inscritas dentro del programa de apertura de monumentos, organizada por la Junta de Castilla y León con la colaboración de la Diócesis de Burgos, han designado a una persona del pueblo que se encargará de abrir las puertas y acompañar al visitante. No se trata de un guía turístico, aunque sus indicaciones serán muy útiles al visitante; pero hallaremos a nuestra disposición un tríptico que explica lo que vamos a ver en cada iglesia. El folleto comienza con unas notas históricas del pueblo, al que sigue un amplio comentario sobre la arquitectura del edificio y sobre las obras más significativas que en él se encuentran.
Como complemento y únicamente en la iglesia de Villatuelda, contamos también con la información de los códigos QR, un total de seis códigos QR distribuidos por la iglesia, contienen la información de cada uno de los cuatro retablos, además de la información referente a la arquitectura de la iglesia, y un último código QR destinado a explicar otras imágenes y obras de arte contenidas en la iglesia. Para poder leer esta información deberemos contar con un teléfono móvil preparado para ello o un Smartphone.
Será muy útil la lectura sosegada del tríptico o la consulta del código QR antes de comenzar la visita, para poder contemplar los detalles de algunas de las mejores obras arquitectónicas del románico, legadas por la denominada: Escuela del Esgueva.
Comenzamos por la visita a la iglesia de la Asunción de Pinillos de Esgueva donde nos vamos a encontrar con la esencia del románico del valle. Nos sorprenderá la belleza de su ábside, dividido por columnas entregas que intercaladas con ménsulas, sostienen una bonita arquería lombarda, sobre la que se apoya la cornisa. Su portada, la bóveda de cañón, el labrado de sus capiteles y la talla de la Virgen de la Blanca, nos hablarán de la técnica de los constructores de la escuela del valle.
A un quilómetro escaso nos encontramos con la iglesia de San Andrés de Terradillos de Esgueva. Es singular en su portada románica y en el embovedado del templo, pues se juntan las románicas bóvedas de cañón de los primeros tramos de la nave, con la bóveda gótica de crucería de sus tramos finales. Dos pequeños retablos, grandes en valoración artística, y dos tallas coquetas de la virgen con el niño, deben contemplase detenidamente.
Tres quilómetros río abajo cruzamos la portada gótica de la iglesia de San Mamés de Villatuelda. El románico de transición de su presbiterio, da paso a una amplia bóveda de crucería, en un templo que es una joya arquitectónica. El magnífico retablo de San Mamés de estilo gótico hispano-flamenco y su púlpito mudéjar al que se accede por un túnel horadado en el pilar, son las obras más singulares que allí se guardan.
Finalizamos nuestra visita a tres quilómetros de distancia en Torresandino. La iglesia de San Martín nos saluda con su portada románica de arco ligeramente apuntado y una arcada gótica sobre el tejaroz. En el interior nos sorprende un amplio presbiterio renacentista, surgido tras la ampliación de una iglesia que nació románica, creció gótica cubriéndose con bóvedas de crucería, y maduró renacentista. Entre las imágenes que cobijan sus numerosos retablos, destacan por su serena belleza, una talla románica de la Virgen de los Valles y un Cristo gótico desclavado, catalogado como uno de los mejor logrados en su estilo.
La apertura de estos templos se contempla como un ensayo de complemento turístico a la próxima exposición de las Edades del Hombre en su edición ribereña del año 2014. Estos edificios son en sí mismos, una obra de arte que solo se puede admirar si nos acercamos a ellos y serán un estupendo reclamo para ampliar la estancia de quienes se acerquen a la capital ribereña a visitar la próximas Edades.
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